Flat White

Creado en Australia o Nueva Zelanda, dependiendo de qué lado estés, el flat white es uno de los estilos de café más populares del mundo. Es similar al latte, pero contiene menos leche, por lo que el sabor a café es más concentrado.

 

Tip - Si no tienes un termómetro para medir la temperatura de la leche, caliéntala hasta que la jarra esté demasiado caliente para tocarla. Una vez que la jarra alcanza esa temperatura, está lista.


Reúne los elementos

Máquina de espresso

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Molinillo de café

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Vaso o taza

1 shot de espresso

Leche fría


1. Moler y prensar

Primero, purga el grupo, calienta el portafiltro y sécalo. 

Después, muele el café recién tostado. Golpea suavemente el portafiltro para asentar el café y prénsalo en una superficie plana. Recuerda que la clave es aplicar una presión uniforme. Después de prensar, usa la herramienta Razor para asegurarte de tener la dosis correcta: la herramienta controla de forma precisa la altura del café prensado.


2. Extraer el shot de espresso

Coloca el portafiltro en el grupo y gíralo hasta que se ensamble. No olvides dejar tus tazas puestas debajo antes de empezar la extracción. Pulsa el botón de dos tazas. El espresso debe caer por las boquillas después de 8 a 10 segundos y fluir como si fuese miel caliente. 

Nota: En este video, dividimos el shot de espresso en dos tazas. La mayoría de los baristas usan el filtro doble para dividir los shots y crear una extracción más equilibrada.


3. The Dual Boiler

La máquina de café que usamos en el video es la Dual Boiler. Como las máquinas profesionales, esta máquina tiene un calentador doble que te permite texturizar la leche mientras extraes el espresso. Si tu máquina solo tiene un calentador, primero prepara el espresso y luego texturiza la leche.


4. Texturizar la leche

Purga el vaporizador y luego vierte leche fría en la jarra hasta antes de tocar la boquilla. Inserta el vaporizador en la leche a una profundidad de 1.5 cm aproximadamente. Abre la válvula de vapor y baja la jarra para introducir aire a la superficie de la leche. El flat white debe tener una capa más fina de microespuma en comparación con un latte o un cappuccino. 

Intenta alcanzar una temperatura de 60 a 65 °C. Si la jarra está muy caliente como para tocarla, es probable que la temperatura sea la correcta. En el caso de las leches vegetales, intenta no superar los 55 °C, pues pueden separarse o presentar grumos. Busca una textura aterciopelada y sedosa. Agita suavemente la jarra y golpéala con cuidado en la encimera para que la leche se integre y no tenga burbujas grandes.